El Premio Nacional de Investigación y precursor de la empresa radicada en el Parque Científico de Murcia fue homenajeado por la Academia de Ciencias de la Región de Murcia.
La plana mayor del mundo científico y académico de la Región arropó este jueves a Pablo Artal, catedrático de Óptica de la Universidad de Murcia (UMU) y CEO de Voptica, que desarrolla sus investigaciones desde el Parque Científico de Murcia. El acto, organizado por la Academia de Ciencias de la Región de Murcia (Accrm) en el Real Casino de Murcia, fue un homenaje a su académico numerario por su nombramiento reciente como Premio Nacional de Investigación “Juan de la Cierva”.
«Las cosas van bien si tienes la suerte de contar con colaboradores mejores que tú». Así inició Artal su conferencia ‘Investigación científica en Murcia. Mi viaje personal’, donde destacó la labor de todas las personas que han pasado por el laboratorio de Óptica de la UMU (LOUM), centro que lidera desde 1994. De esta manera, defendió ante los asistentes que «no solo hay que hacer buena ciencia, sino saber transferirla a la sociedad, ya sea en cinco o en cincuenta años».
Durante la conferencia, bromeó al afirmar que su trabajo principal es recaudar fondos: «Me paso la vida pidiendo dinero, que muchas veces no llega», haciendo de este modo referencia a la necesidad de financiación, especialmente europea, para mantener un nivel alto en la I+D española.
Aprovechó el acto para remarcar, a su juicio, un problema fundamental en España: la situación de la ciencia y la tecnología. «El número de patentes concedidas en todo el país durante 2017 fueron de 1.900, mientras que una única empresa como Huawei creó más de 4.000 en ese mismo año», concretó Artal. También hizo referencia al relanzado Pacto de Estado por la Ciencia, tantas veces impulsado, criticando que «he escuchado hablar de este Pacto desde que era becario. Los políticos no son más que un reflejo de lo que la sociedad les pide».
Tres decenas de patentes
El físico de la UMU ha propiciado más de 30 patentes, algunas de ellas con grandes éxitos de implantación al ser capaces de mejorar la calidad de vida de millones de personas que padecían cataratas en todo el mundo. Hasta su llegada, esta operación se basaba en implantar un lente intraocular que mantenía el modelo de un ojo de edad avanzada. Ahora, gracias a sus innovaciones, se pueden implantar cristalinos propios de una persona joven.
Las cataratas es una de las principales causas de ceguera en el mundo, producidas por la opacidad de un cristalino que no deja de crecer. Se soluciona con la implantación de una lente intraocular, de las que existen muchísimas en el mercado, pero que no siempre se adaptan correctamente a todo el mundo. «Estas lentes pueden compararse con las tallas de zapatos. Aunque sepas que utilizas el 43, no se te ocurriría comprarlos sin probártelos. Ocurre lo mismo con estas lentes, y es lo que pretendemos solucionar desde nuestra spin-off’ Voptica». Esta empresa tecnológica ofrece el único simulador que permite recrear cómo será la visión del paciente después de la operación.
Nuevos rumbos
Entre sus proyectos futuros, el académico numerario de la Accrm está volcando sus esfuerzos en montar una extensión de LOUM en la ciudad china de Changsha, con más de 10 millones de habitantes. Desde el país asiático buscarán cómo prevenir la miopía antes de que se produzca, sobre todo en zonas urbanas asiáticas donde el 95% de los jóvenes sufren esta deficiencia.
También está negociando con gigantes tecnológicos como Facebook, con quien están entrando en el mundo de las tecnologías ‘wearables’, que se basan en incorporan nuevas funciones a nuestras prendas habituales como pueden ser relojes o gafas. Por último, tras su paso por distintas ‘spin-off’, Artal adelantó su interés por ir un paso más allá en la creación de lentes a través de su propia marca.
Reconocimiento académico
Durante el acto, la Academia de Ciencias también rindió homenaje al que fuera su primer presidente, Ángel Ferrández Izquierdo, catedrático de Geometría y Topología de la UMU. Tanto Ferrández como Artal, que lideró la Accrm hasta 2015, recibieron una placa conmemorativa por su paso por la institución.
Cerró la sesión el director general de Universidades e Investigación, Juan Monzó Cabrera, quien alagó la labor de Artal porque «ha demostrado que es posible compaginar la investigación básica y aplicada, siendo ambas complementarias y necesarias, y convirtiéndose en un ejemplo para todos los investigadores universitarios».